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Durante el último quinquenio (2020-2025), la educación secundaria peruana se enfrentó a una serie de transformaciones críticas derivadas principalmente de la pandemia de COVID-19, que alteró profundamente las dinámicas pedagógicas tradicionales. Ante este escenario, esta investigación tuvo como propósito analizar el desempeño académico de los estudiantes de secundaria en Perú a través de una revisión sistemática cualitativa de la literatura científica publicada en dicho período. Se aplicó la metodología PRISMA y se revisaron diez estudios seleccionados en bases de datos indexadas como Scopus, SciELO y Redalyc. Los hallazgos revelaron que el desempeño académico fue determinado por una multiplicidad de factores interrelacionados, entre los que destacaron el entorno familiar, la salud mental, la motivación, la inclusión tecnológica, la segregación socioeconómica y los hábitos de vida. La familia y el apoyo emocional resultaron determinantes para la autoeficacia académica, mientras que la depresión, el estrés y la disfunción familiar afectaron negativamente el rendimiento. Además, las herramientas tecnológicas emergentes y prácticas como la actividad física y la meditación trascendental se asociaron con mejoras significativas en el aprendizaje. Se concluyó que el desempeño académico responde a un entramado complejo de factores, lo que exige políticas educativas integrales y sensibles a las condiciones sociales, emocionales y tecnológicas de los estudiantes.