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El Tratado del Canal de Panamá, celebrado por Omar Torrijos, jefe de Gobierno de Panamá y Jimmy Carter, presidente de los Estados Unidos de América, cuyo propósito fue desmontar el enclave colonial en el Istmo de Panamá, entregar el Canal al legítimo dueño del territorio y retirar las bases militares estadounidenses de Panamá, estipuló que a los cinco años de la entrada en vigencia este tratado, los Estados Unidos pondrían fin a la Escuela de las Américas en Panamá, institución que había operado por varias décadas en la Zona del Canal, entrenando a las fuerzas militares latinoamericanas, actividad repudiada por los pueblos de la región, en virtud de la actitud golpista y represiva de tales fuerzas en muchos países. En 1984 debía concluir tal Escuela, pero el general Manuel Antonio Noriega, comandante en jefe de las Fuerzas de Defensa de Panamá y el general Paul Gorman, jefe del Comando Sur, celebraron un acuerdo para que la institución siguiera funcionando en nuestro país, con otra denominación. A esta situación complicada se enfrentó el presidente Jorge E. Illueca, con el propósito de impedir que los Tratados Torrijos-Carter fueran burlados. Su actitud firme y decidida logró imponerse a todo tipo de presiones internas y externas, de tal forma que el mandatario recibió el 1.º de octubre de 1984, en representación de la República de Panamá, todas las instalaciones donde funcionaba hasta el día anterior dicha Escuela de las Américas, que cerró definitivamente sus operaciones en el territorio nacional.
