La crisis estructural por la que atraviesa Panamá en la actualidad tiene orígenes de vieja data y que se manifiestan de manera cíclica en tiempo y espacio que suelen profundizarse durante las crisis coyunturales. Si bien la crisis coyuntural combina factores endógenos y exógenos, tiene como base los problemas estructurales de una crisis sistémica que pasa primeramente por un modelo económico agotado que tiene distintas manifestaciones en la estructura productiva y en lo institucional, teniendo su mayor expresión en los conflictos políticos y sociales.
La solución de estos problemas pasa por un ejercicio de comprensión de sus detonantes y sus mecanismos de transmisión, atendiendo los problemas más inmediatos con soluciones que mantengan el funcionamiento del Estado y de los mercados, pero con un revisión profunda de los objetivos y medidas de solución permanente en los sectores más importantes como lo son la educación, salud y servicios básicos, para garantizar la estabilidad económica, política y social del país y direccionar de manera correcta la política de estado en materia de desarrollo económico y social.