Las mordeduras de animales pueden producir lesiones de diversa gravedad con riesgo y secuelas cosméticas, complicaciones infecciosas, daños emocionales y elevados costos sanitarios. En nuestro país son escasos y parciales los datos estadísticos y epidemiológicos locales. El blanco de esta investigación fue la población de 1 a 15 años atendidos en instalaciones de salud del Distrito San Miguelito durante los meses de enero a junio de 2008. Los objetivos generales del estudio fueron determinar la incidencia de menores atendidos por mordeduras y ataques de perro; describir los tipos de traumatismo y la gravedad de las lesiones físicas más frecuentes. Se trabajó con dos grupos: menores atendidos por otras causas (Grupo Control) y menores atendidos por mordeduras de perro (Grupo Experimental). Se analizaron las variables sexo, edad, gravedad de la atención y estación climatológica de la atención. Con los resultados fue posible confeccionar un perfil de los menores que son afectados por mordeduras caninas: mordeduras en la cara y extremidades superiores hechas por el perro de la casa a menores masculinos de 1 a 5 años durante la estación seca. Otros resultados relevantes fueron que al aumentar la edad de los menores, disminuye la cantidad de afectados y las mordidas son en las extremidades superiores; la incidencia por mordeduras caninas en los menores de 1 a 15 años fue 33,3%. Mediante pruebas de hipótesis se concluyó que: entre los menores de 1 a 5 años, la proporción de afectados por mordeduras caninas es mayor que la proporción de afectados por otras causas de traumatismo.