Este estudio tiene como objetivo identificar las especies de caracoles y babosas terrestres que podrían invadir Panamá a través de los sitios de carga y descarga de mercancías nacionales e internacionales en la Ciudad de Panamá y Colón, junto con sus probables lugares de origen. La investigación también considera los impactos ecológicos, económicos y de salud de estas posibles especies invasoras. Entre septiembre de 2008 y septiembre de 2009, se realizó muestreo en los principales puertos marítimos y aeropuertos de la Ciudad de Panamá y Colón, incluyendo sus contenedores, almacenes y hábitats naturales circundantes. El estudio utilizó GPS para marcar las ubicaciones con precisión, y el muestreo se llevó a cabo dos veces por semana. Se recolectaron especímenes, con material vivo fijado en alcohol al 70%, y se diseccionaron babosas para la identificación a través de órganos sexuales. La identificación taxonómica involucró características conquiológicas y consulta experta, con los datos analizados para correlacionar la abundancia de especies con la precipitación y la humedad. Se recolectaron un total de 2379 individuos, identificando siete especies en nueve géneros y cuatro familias taxonómicas, siendo la familia Subulinidae la más abundante. Notablemente, Praticolella griseola, una plaga agrícola, y Hapiella w. f. decolorata fueron nuevos registros para Panamá. El estudio encontró que la riqueza y abundancia de especies se correlacionaba con la lluvia, pero no con la humedad relativa. La investigación destacó la importancia de cuarentena de varias especies debido a sus roles como plagas y vectores de enfermedades como Angiostrongylus cantonensis y A. costarricensis. Panamá alberga una diversidad ecológica moderada de gasterópodos, con ciertas especies que representan riesgos significativos para la agricultura, la salud pública y los ecosistemas nativos. El estudio subraya la necesidad de vigilancia y manejo continuos de las introducciones de moluscos no nativos, particularmente en un centro de comercio global como Panamá. Identificar y comprender la distribución de gasterópodos invasores es crucial para desarrollar medidas de control efectivas y mitigar su impacto en el medio ambiente y la salud humana.