Datos colectados en los siglos XIX y XX indican una disminución en la intensidad del Campo Magnético de la Tierra (CMT). Esto está ligado al origen de dicho campo. Desde 1600 hasta hoy, se han presentado varios modelos para explicar el origen del CMT. Sin embargo, ninguno es capaz de derivar satisfactoriamente sus características. En este trabajo, presentamos dos modelos representativos: El “Modelo del Dínamo Autoinducido”, y sus variantes plantean que el flujo de partículas cargadas del núcleo externo de la Tierra da origen y refuerza el CMT. El movimiento de este flujo es complejo y caótico. Por tanto, de cuando en cuando, la polaridad del CMT se invierte (reversiones). Durante una reversión, la intensidad de nuestro campo decrece por largo tiempo luego cambia su dirección y aumenta otra vez. El “Modelo del Decaimiento” ha tenido un nuevo impulso recientemente. Según éste, las corrientes en el núcleo externo de la Tierra, que originaron nuestro primer campo magnético, han estado decayendo desde entonces, a una tasa exponencial. Ninguno de los modelos presentados está libre de dificultades, por lo que la controversia continúa y nos lleva a la búsqueda de nuevos modelos.