El avistaje de aves constituye una de las actividades eco turísticas más prometedora en las comunidades rurales, que bien organizada puede ayudar a generar ingresos rentables a sus ofertantes y a propiciar su desarrollo sustentable. Para la Reserva Forestal Fortuna se han reportado 299 especies, que están incluidas en 214 géneros, 50 familias y 17 órdenes. Este total representa el 30.8% del total de las especies reportadas para el país. Además, soporta 41 especies de aves con distribución restringida, 12 en peligro, 48 vulnerable, 4 con rango N2 y 7 con rango N3. El análisis a nivel de especies, sugiere que la gran mayoría de las aves son de bosque secundario y de rastrojos de tierras bajas y en menor grado de bosque premontano no perturbado. Este último tipo de ecosistema podría servir para explicar la notable presencia de especies de interés ornitológico que incluye algunas especies amenazadas y endémicas, “raras”, protegidas por ley nacional, CITES y UICN. La presencia de especies que poseen hábitat de distribución restringidas y “raras” son un excelente atractivo para los observadores de aves, por lo que, la promoción de la Reserva junto a una adecuada selección de los sitios, podría incentivar a que más observadores profesionales, científicos y naturalistas se interesen por conocer esta preciada diversidad. Otro elemento que contribuye a resaltar el papel de la Reserva Forestal Fortuna, es el de servir como sitio de tránsito para las aves migratorias del norte.