Hace un tiempo atrás, la violencia doméstica era considerada como una conducta normal y aceptada, para muchas familias de diferentes culturas. Sin embargo, con el transcurrir del tiempo y gracias a muchas investigaciones, fueron identificados los prejuicios y daños físicos y emocionales que causa la violencia doméstica a las víctimas y a los miembros de la familia.
El hogar es el lugar donde se debe cuidar y proteger a sus miembros, pero en ocasiones es el lugar más violento y donde ocurren situaciones de violencia extrema, hasta llegar a la muerte. Son muchos los factores que en diferentes investigaciones se han encontrado relacionados a la violencia doméstica, Perluz, (2017); Fiestas, Rojas, Gushiken, Gozzer, (2012); Vaiz Bonifaz y Nakano, (2004); Alencar-Rodríguez y Cantera, (2013). En este artículo queremos abordar el consumo del alcohol, la infidelidad y la baja autoestima de las víctimas como factores que predisponen para que se presente la violencia doméstica. Este artículo surge de las entrevistas efectuadas a las tres primeras participantes en el estudio, que se realiza actualmente sobre el tema de violencia doméstica.